PATATAS CON COSTILLA FRESCA
Las patatas guisadas es uno de los platos más socorridos del invierno. Se pueden hacer con cualquier cosa (carne o pescado) y la preparación es casi la misma, aunque hay que tener cuidado, porque si se hacen con carne (como en este caso) hacer primero la carne un poco, sino quedaría muy dura, ya que la patata se cuece en 20 minutos nada más.
INGREDIENTES:
- 1/2 kg. costilla de cerdo fresca
- 1 1/2 kg. patatas
- 1/2 cebolla
- 1/2 pimiento
- 1 zanahoria
- sal gorda
- pimentón ocal
- aceite de oliva
- vino blanco
- agua
PREPARACIÓN:
Rehogamos bien la costilla (cortada previamente). Añadimos la cebolla, el pimiento y la zanahoria (picado todo en trozos medianos, que se vean bien) y seguimos rehogando. Añadimos un puñado de sal y una cucharada de postre de pimentón, revolvemos. Echamos un buen chorro de vino y dejamos reducir. Lo cubrimos de agua y lo dejamos hacer a fuego medio, durante 30 minutos aproximádamente.
Mientras, pelamos las patatas, las lavamos y las cortamos en cachelos.
Cuando haya pasado y reducido el caldo, añadimos las patatas, que las rehogaremos un poco con la carne.
Volvemos a cubrir el guiso con agua y lo dejamos cocer, hasta que veamos que la patata está cocida.
CONSEJOS ÚTILES:
Antes de apagar el fuego debemos probar de sal, porque al haber estado añadiendo agua, puede que en el último momento que soso.
Esta vez las he hecho con costilla fresca, pero se pueden hacer con costilla adobada. La diferencia es que , yo sólo echo de verdura, la cebolla y a veces pimiento. Hay que tener mucho cuidado con el adobo, que no se queme, removiéndola mucho. El resto es igual.
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